Una estrella de luz y la Virgen- 9/02/2013
Oraba
en la madrugada, la Madre Santa me acompañaba, mi visión estaba nublada
como si hubiera un velo delante de mis ojos. Veía a la Virgen como si
estuviera de pie sobre un tronco de árbol. Después de un tiempo, vi que
desde lo alto y desde la izquierda se acercaba una luz, resplandeciente
como una estrella, salían destellos de ella. Bajaba despacio hasta que
se posiciono enfrente y por encima de mi.
La Virgen
había bajado la cabeza, juntando las manos en posición reverente y
humilde. Sentí que el ser luminoso me observaba intensamente. En mi
conciencia surgió una afirmación, dirigiéndome a la luz. “Esto es lo que
soy”, mostrándome interiormente transparente.
Percibí
el gran poder del Ser que se mostraba a través de la luz, la virgen se
mostraba mas humilde, inclinando la cabeza humildemente y en silencio.
Sentí la no aprobación del ser de luz, “no esta preparado”, escuche que le decía a La Virgen.
La
Madre Celeste hablo y me apoyo, la veía hablar pero no escuchaba sus
palabras, sólo observaba sus gestos, hubo un momento en que la firmeza
de ella me hizo entender su total apoyo y confianza. Lo cierto es que
después de un momento de debate entre ellos, tome conciencia de que era
Jesucristo en su forma Cósmica el que me aceptaba por intercesión de la
Madre Santísima. Después de esto entre en conciencia normal.
He meditado en esta escena, soy consciente de mis muchos errores e imperfecciones, tanto de pensamiento como de obra.