Zona intermedia 27/02/2016
Me ven pero temen acercarse. Se acercan y se alejan en grupo.
Es el segundo o tercer día que accedo a este lugar durante la meditación, igual que anteriormente, rezo a Dios por ellos, para que los ilumine y les ayude a ascender hacia la luz.
Aunque hay menos de los que había ayer, siento que son insensibles a la oración o que no logró conectar con ellos.
Oro más intensamente a Dios para que les ayude. De repente se abre una escalera de varios tramos al fondo de la cueva y al final una puerta abierta, por lo que se vislumbraba una gran claridad.
Al lado de la puerta un Ángel grande con alas blanco relucientes comienza a recibirlos, y los ayuda a activar sus corazones de luz.
Los recibe uno por uno, los ayuda y simplemente desaparecen por la puerta.
Me alegro profundamente y salgo de la meditación.